Docente, Profesor Agregado del Departamento de Toxicología, Coordinador de la Unidad Pediátrica Ambiental y del Curso Electivo "Salud y Toxicología Ambiental".
Ha tenido participación como docente en Cursos nacionales e internacionales sobre Salud Ambiental Infantil. Participa de proyectos de investigación, es autor y co-autor de libros y publicaciones nacionales e internacionales, relacionados a la temática ambiental y su efecto sobre la salud.
Presentation abstract:
La "Chatarra o Basura Electrónica", residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE), son un tipo de desechos sólidos que va en rápido crecimiento a nivel mundial. Es fuente de sustancias químicas (metales, retardantes de llama, plásticos hidrocarburos entre otros), muchas de ellas tienen un valor económico y son recuperadas para algunos procesos productivos; otras van a formar parte de vertederos mezclados con basura municipal en la mayoría de los países y contaminan las distintas matrices ambientales causando exposición de seres humanos.
Los procesos de recuperación de estos materiales no están bien regulados a nivel mundial, en muchos casos son el sustento económico de familias sobre todo en los países más pobres, se realizan en condiciones precarias como trabajo informal (reciclaje, desmantelamiento manual y quema a cielo abierto) siendo esta forma de reciclado mucho más contaminantes para quienes participan del proceso y para el ambiente.
En Uruguay, el reciclaje de RAEE y particularmente la quema de cables para obtener cobre, constituye una fuente de exposición a plomo para los propios recicladores y para otras poblaciones vulnerables (niños y embarazadas) que viven en el entorno de los puntos de quema.
Muchas de estas sustancias químicas y sus mezclas tienen efectos tóxicos bien conocidos como alteraciones: endocrinas, respiratorias, reproductivas, en el crecimiento, neurodesarrollo y comportamiento. Algunas se han identificado como genotóxicas, mutagénicas y cancerígenas. Los procesos precarios de recuperación pueden ocasionar otros riesgos a la salud, lesiones y heridas durante el desmantelamiento manual, y quemaduras con la incineración y baños ácidos.
La problemática de los RAEE y el manejo de los desechos eléctricos y electrónicos se han identificado como un riesgo ambiental en permanente crecimiento y como un problema para la salud pública.
A nivel internacional existen convenios y tratados ratificados por los países que regulan el transporte y la importación de los RAEE.
En el año 2013 la Organización Mundial de la Salud, lanza una iniciativa destinada a informar, capacitar y educar a distintos actores sobre los riesgos del manejo de RAEE, con el fin de disminuir las consecuencias sobre la salud de las poblaciones más vulnerables.
Otras organizaciones recientemente están abordando estrategias con el fin de mejorar las prácticas de reciclaje haciendo énfasis en la protección del trabajador y la prevención de la exposición ambiental.